Celebramos los seis años de la Ley de Matrimonio Igualitario. Tenemos los mismos derechos con los mismos nombres.
Otro 15 de julio nos convoca para seguir celebrando que tenemos una Ley de Matrimonio Igualitario en Argentina. La lucha de las organizaciones de la diversidad, de la sociedad civil y de tantxs militantes, artistas, intelectuales y ciudadanxs comunes que acompañaron el intenso camino tuvo el principio de coronación en la Cámara de Diputados, el 4 de mayo de 2010 con la media sanción, hasta que el 15 de julio el Senado aprobó la Ley tan esperada por todxs. Por fin pudimos decir: ”Tenemos los mismos derechos con los mismos nombres”.
Con esta Ley, Argentina se convirtió en el primer país de Latinoamérica en garantizar legalmente el derecho al matrimonio entre personas del mismo sexo. Desde ese instante, con un Estado Nacional que propició el debate en la agenda pública y política, avanzamos por leyes que nos garantizan mayor igualdad real. Llegaron así la Ley de Identidad de Género, la Ley de Reproducción Asistida, la Ley contra la Discriminación en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, la Ley de Femicidio y muchas otras que construyen la igualdad jurídica que hoy tenemos. Y los desafíos se potencian porque ahora vamos por la nueva Ley Antidiscriminatoria Nacional que impulsamos hace años en el Congreso de la Nación y hoy se discute en ambas Cámaras, y por una Ley Integral Trans para el acceso a todos los derechos de las personas trans.
La Presidenta Marcela Romero expresó: “Todavía tenemos mucho por hacer para que esta igualdad legal se transforme en igualdad real, pero nos llena de orgullo tener una Ley de Matrimonio Igualitario que les ha cambiado la vida a miles de personas LGBT y nos ha convertido en una sociedad más justa. Celebramos estos seis años siempre alertas porque siguen los ataques a la comunidad LGBT, especialmente a las personas trans, y por eso vamos por una Ley Antidiscriminatoria Nacional y por una Ley Integral Trans porque no vamos a dar ni un paso atrás”.
El Vicepresidente Esteban Paulón dijo: “Son seis años de igualdad. De igualdad real. La Ley de Matrimonio Igualitario es nuestro sello distintivo, es producto de la construcción colectiva. Es nuestra ley de la igualdad porque nos pertenece a todxs. Pero ninguna ley modifica automáticamente realidades naturalizadas por siglos. Como ya hemos expresado, tenemos que seguir dando las batallas que haya que dar para transformar profundamente la cultura y la sociedad desde un pie de igualdad porque esta Ley amplía derechos, nos hace mejores y nos convierte en una sociedad mucho más justa e igualitaria”.